jueves, 9 de octubre de 2008


Hoy tengo ganas de hacerle una mención especial a una persona que es más que importante para mí. Mi compañera, mi compinche, mi aliada, mi amiga, mi mejor amiga. La que nunca se va a cansar de escucharme aunque diga dos mil boludeces por minuto, la que va a estar conmigo aunque tenga el peor humor del mundo, la que con el mayor cansacio del mundo me agarró del brazo y me apretó muy fuerte la mano y me dijo Sigamos, dale sigamos! y hasta el final me alentó para llegar hasta Luján, la que a veces está de mal humor y no tiene ganas de hablar y que a veces le agarran ataques de soledad y de decirme que es una mierda y que me aleje de ella porque es una mierda, y cuando me lo dice yo me río porque es como un chiste, ya que alejarme de ella es algo que NUNCA se me cruzó por la cabeza, la que como no tengo crédito en el celular me llama casi todos los días para ver cómo ando y para hablar, la que se preocupa porque yo tengo un quilombo en la cabeza y me dice Tenés que hacer esto! con su mejor onda y yo le digo No! y me dice pero es por tu bien! y yo no le doy bola y siempre tiene razón y siempre piensa en mi bien, la que se fija hasta en las cosas más mínimas, si yo soy histérica y me quiero sentar del lado de la ventanilla en el colectivo me deja sentarme donde quiero y si quiero cigarrillos Camel o si quiero tal cosa, ella siempre está en todos los detalles. Es imposible sentirme sola con ella porque está siempre y siempre tiene la solución por más loca que sea. GRACIAS porque cada día que pasa me demostras que puedo confiar más en vos, sos todo amiga. Te amo muchísimo.

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Todos buscamos la perfección, pero muy lejos estamos de ella.